Datos del censo 2004/2005, reflejan que la ganadería uruguaya comprende 50771 explotaciones (DIEA, 2006), especializadas en ganadería (78%), agricultura-ganadería (14%), y lechería (8%). Ocupan un área de 16.306.000 has, distribuidas en 78, 17 y 5% para ganadería, agricultura-ganadería y lechería respectivamente. A esa fecha el área de pasturas mejoradas a nivel de país representaba el 17% con variaciones entre rubros. La base forrajera disponible soportaba aproximadamente 12.000.000 vacunos y 10.800.000 ovinos. Se muestra la importancia clave de las pasturas como soporte de la ganadería uruguaya, y pautan los escenarios y las estrategias a seguir en el mediano plazo por las diferentes cadenas de producción.
Las pasturas nativas son el principal recurso natural renovable del país, pues además de su función productiva previenen la erosión del suelo. Es relevante definir medidas de manejo de las diferentes comunidades naturales, para mejorar productividad y asegurar la biodiversidad. Sin embargo, la situación actual de competitividad y globalización de los mercados requiere dinamizar el proceso productivo de manera económica y sostenible y adquiere así relevancia la adecuación de la base forrajera, incorporando proporciones crecientes de pasturas con mayor potencial productivo y persistencia, aplicando correctas medidas de manejo y disminuyendo los riesgos derivados de malezas, plagas y enfermedades.
El consumo de forraje por pastoreo directo o eventualmente conservado, es la base nutricional de los rodeos y majadas del Uruguay. A ello, se agrega el beneficio de alternar pasturas (particularmente mezcla de gramíneas y leguminosas) con cultivos en rotaciones agrícola-ganaderas, que dan una mayor estabilidad biológica y económica a los sistemas productivos. En este contexto, en zonas ganaderas sin tradición ni potencial agrícola, el mejoramiento de campos naturales por fertilización fosfatada y siembra superficial de leguminosas, presenta elevada productividad y menores modificaciones al ecosistema, que la sustitución total de la vegetación nativa por una pastura cultivada, con las correspondientes ventajas desde el punto de vista ambiental. No obstante, verdeos y pasturas cultivadas representan una herramienta productiva fundamental en zonas agrícola-ganaderas y lecheras, así como en situaciones específicas de intensificación creciente de predios ganaderos. En todos los casos, la definición y ajuste de los distintos criterios de manejo, potencia la expresión productiva correspondiente.
La disponibilidad de cultivares forrajeros adaptados a distintos ambientes y sistemas de producción, impacta decisivamente en la productividad y/o persistencia de cada componente de la cadena forrajera. El Mejoramiento Genético de plantas forrajeras, para liberar materiales adaptados y productivos, constituye una actividad permanente y de largo plazo del Programa.
ENFOQUE ESTRATÉGICO
En Uruguay, los sistemas productivos predominantes, tanto intensivos como extensivos, continuarán buscando combinar una adecuada producción de forraje con una buena calidad del mismo basados en el uso directo de la pastura como principal componente de la dieta animal. De este modo, se buscará conjugar la vía más económica de alimentación con un manejo amigable del animal, aspectos que representan ventajas comparativas en escenarios a futuro. Se debe entender que debemos especializarnos en producir forraje como elemento básico.
La variabilidad de producción de las pasturas seguirá siendo un común denominador de los sistemas y un punto de vulnerabilidad, en particular de aquellos con un menor grado de control, siendo el invierno el primer elemento de atención pero transformándose el verano-otoño en el elemento de mayor variabilidad a medida que se incrementa el grado de intensificación. Sin duda, los concentrados, forrajes conservados y granos y otras prácticas serán determinantes en reducir la variabilidad en sistemas con menor grado de control. Asimismo, el adecuado control de la calidad y cantidad de pastura ofrecida juega un rol fundamental en los niveles de consistencia y homogeneidad del producto animal obtenido.
Existe una tendencia a nivel mundial a desarrollar cultivares forrajeros que promuevan una mejora en la calidad de productos (leche, carne, lana). Si bien existe un paso previo a través de mejorar la eficiencia de utilización es importante incorporar este concepto en el mejoramiento genético de forrajeras. El uso de pasturas para fines específicos se verá acrecentado, lo que conlleva a ampliar el menú de especies utilizadas en la actualidad, en función de los objetivos a lograr en cada caso.
La eficiencia de utilización de la pastura será un elemento central tanto del punto de vista biológico como económico, para lo cual es necesario desarrollar modelos de manejo de la pastura basados en elementos de toma de decisión prácticos que contemplen la interfase suelo-planta-animal. Las decisiones para el manejo de las pasturas estarán enfatizadas por el entendimiento mayor de variables tales como la disponibilidad post-pastoreo, la altura y la oferta, así como la presupuestación y disponibilidad de forraje a nivel predial, aún en aquellos sistemas con un alto grado de heterogeneidad de la pastura. En ese sentido, la variabilidad espacial debe ser asumida y abordada como tal, tanto en el análisis de la pastura como en el estudio de la conducta y el proceso de pastoreo.
Se deben definir niveles de intensificación de los sistemas que no comprometan los parámetros de calidad ambiental, a través de indicadores y estrategias de uso de los recursos involucrados. En un escenario futuro, el uso de insumos tales como los fertilizantes, en especial nitrogenados, seguirá siendo limitado en nuestras condiciones, primeramente por una lógica de costo económico y si así no fuera en el otro extremo por una razón de tipo ambiental. Por otro lado, dependemos de fertilizantes fosfatados y dentro de estos el uso de fuentes naturales en muchas situaciones permite ventajas comparativas en la eficiencia biológica, costo económico e impacto ambiental. Por tanto, la leguminosa y el proceso de fijación simbiótica del nitrógeno seguirán jugando un rol central en potenciar la producción del sistema. De hecho, deberemos manejar un balance entre una mayor presión de uso por incrementar la productividad y la búsqueda de reducir impactos ambientales.
Desarrollo, adaptación y validación de soluciones tecnológicas, que potencien la producción y maximicen la eficiencia de utilización de pasturas en diferentes cadenas de producción de forma sostenible en el tiempo, bajo un uso racional y responsable de los recursos disponibles, contribuyendo al beneficio socio-económico de los productores y de la sociedad en su conjunto.
Desarrollar y hacer disponible de manera efectiva para los productores nuevas variedades forrajeras, mejoradas y adaptadas. La incorporación de nuevas especies y variedades, conjuntamente con la valorización de las especies nativas y naturalizadas, permitirá potenciar la competitividad del sector, el valor de los productos agropecuarios y el retorno económico de los sistemas de producción tanto intensivos como extensivos.
Disponer y fomentar soluciones tecnológicas en el manejo y control de plagas, enfermedades y malezas de pasturas que sean reconocidas por su bajo impacto ambiental, promoviendo una imagen de sistemas de producción seguros, responsables y ambientalmente amigables.
Contribuir a un uso eficiente y sustentable de la base forrajera, compatible con las demandas del animal, integrado a los procesos productivos y los requerimientos de los mercados. La falta de conocimiento en las relaciones suelo-planta-animal impide una mejor caracterización de los procesos de utilización de pasturas así como sus interacciones con el suelo y las comunidades bióticas. Su conocimiento mejorará la comprensión de los procesos productivos y de la dinámica de la vegetación a los efectos de mejorar la productividad y sustentabilidad de los sistemas predominantes.
Establecer adecuadas prácticas de manejo y uso de insumos en pasturas naturales e introducidas desde una perspectiva biológica, ambiental y económica. La acción individual o conjunta de estreses de energía (manejo de defoliación), competencia (mezclas), nutricionales (fertilización, riego, otros), factores bióticos y abióticos (compactación, patógenos) provocan pérdidas en la productividad y persistencia de las pasturas, los cuales inciden en los resultados biológicos y económicos
Revalorizar al sistema campo natural como soporte básico de la ganadería, incrementando su potencial productivo en forma sustentable, promoviendo nuevas vías de agregado de valor que permitan mantener su biodiversidad y reducir la incidencia de impactos negativos provocados por prácticas de manejo inapropiadas.
Las áreas prioritarias definidas en el plan estratégico 2007-2011 son:
· Mejoramiento genético en forrajeras
· Manejo integrado de malezas, insectos-plaga y enfermedades de pasturas
· Utilización de pasturas y su impacto en la relación suelo-planta-animal
· Manejo agronómico de pasturas
· Manejo sustentable del campo natural
Se reconoce el valor del campo natural como soporte básico de la ganadería, el cual debe ser revalorizado a través de prácticas de manejo sostenibles, promoviendo nuevas vías de agregado de valor y/o sistemas que permitan mantener su biodiversidad. La incorporación de nuevas especies y variedades forrajeras, mejoradas y adaptadas, permitirá potenciar el valor de los productos agropecuario y el retorno económico de los sistemas de producción, en especial en áreas de ganadería extensiva. Se debe continuar contribuyendo al desarrollo de prácticas de manejo y uso de insumos en pasturas naturales y mejoradas, integradas en los sistemas desde una perspectiva biológica, ambiental y económica. Se reconoce la importancia de un uso eficiente y sustentable de la base forrajera, compatible con las demandas del animal, integrado a los procesos productivos y los requerimientos de los mercados. Se debe disponer de soluciones tecnológicas de control de plagas, malezas y enfermedades que sean reconocidas por un nivel de impacto ambiental aceptable, promoviendo una imagen de sistemas de producción seguros, responsables y ambientalmente amigables.
Durante el período 2006-2007 se ha continuado el trabajo en las diferentes áreas definidas como prioritarias (Mejoramiento genético en forrajeras, Manejo integrado de malezas, insectos-plaga y enfermedades de pasturas, Utilización de pasturas y su impacto en la relación suelo-planta-animal, Manejo agronómico de pasturas y Manejo sustentable del campo natural):
Mejoramiento genético en forrajeras
En el marco del programa de mejoramiento genético de leguminosas para suelos de zonas ganaderas, se continúan los trabajos en relación al cultivar INIA Glencoe, de Lotononis bainesii, para suelos superficiales de Basalto. Asimismo, se avanzó en el mejoramiento y selección de una leguminosa del género Ornithopus destinada también a suelos superficiales.
Se amplió la evaluación agronómica parcelaria (sobre suelos de Lomadas y Sierras del Este, Cristalino del centro y Basalto), sobre el comportamiento de la promisoria línea LE 205 de Lotus pedunculatus tetraploide, perenne (de crecimiento primavero-estivo-otoñal), seleccionada en INIA La Estanzuela por mayor producción de semillas que el cv Maku, con destino a sistemas ganaderos.
Se continúa la evaluación en el INASE, de líneas superiores de Lotus corniculatus (LE 121) y de Medicago sativa LE 71-133 seleccionada a partir de Estanzuela Chaná (con mayor tolerancia a enfermedades de la implantación), realizándose la multiplicación de semilla madre de la línea experimental. En trébol rojo, también se envió a evaluación oficial una línea experimental (LE 113), de floración temprana y buena producción de semilla. En Trifolium vesiculosum se ha avanzado en la selección de un material.
En el marco del Convenio INIA/AgResearch/Gentos, está prevista la liberación comercial de dos nuevos cultivares: Goliath, tipo intensivo de hoja grande, y Aquiles, tipo de hoja media, estolonífero de persistencia vegetativa.
En gramíneas se liberó un nuevo cultivar de cebadilla (Bromus catharticus) con el nombre de INIA Leona, bianual, de performance superior a los existentes en el mercado de acuerdo a la evaluación oficial del INASE.
En Lolium multiflorum se ha finalizado el proceso de mejoramiento de tres materiales, dos diploides (LE 19-45a y LE 19-55)y un tetraploide (LE 19-63). En Festuca arundinacea se ha finalizado el proceso de mejoramiento de dos materiales, una temprana (LE 14-84) y otra tardía (LE 14-86). En Dactylis glomerata también se ha completado el proceso de mejoramiento de dos materiales, uno temprano (LE 12-41d) y otro tardío (LE 12-90). En Holcus lanatus se ha completado el proceso de mejoramiento de dos materiales, uno temprano (LE 17-15) y otro tardío (LE 17-14). En Festulolium (LE 16-26)se ha completado el proceso de selección de un material, recomendado para sistemas intensivos de rotación corta. Estos materiales siguen los pasos para completar el proceso de liberación.
Manejo integrado de malezas, insectos-plaga y enfermedades de pasturas
En esta área, debido a una amplia demanda por información por el tema malezas de campo se ha desarrollado una serie de actividades de difusión donde se destacan entre otras dos seminarios de actualización técnica (Young 24/5/07 y Treinta y Tres 18/6/07), conjuntamente con la publicación de la Serie Técnica 169.
De acuerdo a lo previsto para el período 2006-2008, se continúa con el apoyo técnico y económico a la campaña de control de Margarita de Piria en conjunto con el MGAP, ANPL, MTOP y las Intendencias de Colonia, Florida, San José, Canelones y Maldonado.
Dada la creciente problemática de Capin Annoni, se continúa la investigación en tema, habiéndose informado (8/08/07) a nivel de la Comisión de Agricultura del Parlamento conjuntamente con otras instituciones y organismos relacionados al tema. Está previsto reforzar acciones a los efectos de apoyar las campañas de control de esta maleza.
Utilización de pasturas y su impacto en la relación suelo-planta-animal
En esta área se están realizando diferentes estudios que atacan la problemática de referencia. En particular, la problemática estival está siendo abordada a través de ampliar la evaluación de alternativas forrajeras de verano, utilizadas en diferentes procesos productivos (engorde de corderos precoces, destete de terneros).
En la Serie Actividades de Difusión 499 de INIA Treinta y Tres, se presenta información preliminar sobre el tema.
Manejo agronómico de Pasturas
Se han comenzado las actividades relacionadas al nuevo plan estratégico, donde se destacan los estudios relacionados a una nueva guía de producción de pasturas y de fertilización fosfatada. Se continúa con el desarrollo de paquetes de manejo agronómico para diferentes especies y cultivares en etapas próximas de liberación.
Se ha publicado la Serie Técnica 161 sobre Avances en la siembra directa de pasturas, que recoge un amplio volumen de información generado en INIA La Estanzuela.
Manejo sustentable del Campo natural
Se están incorporando áreas de trabajo en campo natural, referidas a sustentabilidad de los sistemas mediante la definición de indicadores capaces de determinar niveles de degradación, en el norte y este del país. Se trabaja en determinación de especies y el impacto de uso de diversas cargas sobre la composición de comunidades vegetales.
Se mantiene el Acuerdo con la Intendencia Municipal de Maldonado, en relación al campo de recría El Solar y se incorpora en apoyo actividades en el predio del sr. Hector Rubio, integrante del CAR de INIA Treinta y Tres, en suelos de sierras entre San Carlos y Pan de Azucar, para actividades de experimentación y demostración.
Se continúan también actividades en Acuerdo con la Sociedad de Fomento de Flores, en su campo demostrativo de tecnologías forrajeras. Se ha conformado además en el predio un pequeño campo experimental parcelario.
Se continúa con la co-coordinación técnica del Proyecto Internacional LOTASSA, nucleando el esfuerzo coordinado de equipos multidisciplinarios de 14 instituciones de 8 países de Europa y el Cono Sur. Sus principales objetivos refieren a incrementar la adaptación de materiales del género Lotus a ambientes con stress abiótico, mejorando productividad y sostenibilidad de sus pasturas en América del Sur.
Se continua trabajando en el Proyecto Fontagro FTG 787/2005en la colectas y caracterización de poblaciones criollas de leguminosas naturalizadas (Lotus corniculatus y Trifolium pratense).
Se ha comenzado el desarrollo de cooperación con el Grasslands Institute of Inner Mongolia y la CAAS de China, habiéndose recibido la visita entre el 7-13 de mayo de 2007 de una delegación integrada por los Drs. Li Zhi-yong, Chen Libo y Su He, especialistas en las áreas de conservación de recursos genéticos, mejoramiento genético y sistemas de información/sensoramiento remoto.
Entre el 20-26 de mayo de 2007 se recibió la visita del Dr. Peter Kemp de la Universidad de Massey, quien brindó apoyo técnico en las áreas de silvopastoreo y especies forrajeras alternativas.